
- Considera el presidente Ortega en la XVI Cumbre del ALBA-TCP
Como una expresión del multilateralismo, calificó el presidente Daniel Ortega la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TPC) durante la XVI Cumbre de Presidentes de este organismo celebrada en La Habana este 14 de diciembre, a propósito de estar cumpliendo 14 años de ser fundado por los comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez.
La Cumbre, que contó con la presencia de jefes de Estado y de Gobierno de doce países de América Latina y El Caribe, se efectuó con el propósito de reafirmar el compromiso de unidad, cooperación, solidaridad e integración de los pueblos que conforman el ALBA; hacer un balance de los objetivos alcanzados en 2018; y preparar acciones de trabajo para 2019.
El ALBA es “una expresión en una lucha por la vida, una lucha por la paz, por el bienestar de nuestros pueblos”, dijo el comandante Ortega, destacando que con ese objetivo nació y sigue desarrollándose la Alianza a pesar de las arremetidas que ha sufrido y a pesar de los golpes que han sufrido gobiernos progresistas que ayudaban a fortalecer un proceso democratizador y de integración en la Celac.
“A pesar de esto, todavía el ALBA no se ha desintegrado, el ALBA no se ha rendido, el ALBA no se ha vendido”, exclamó el mandatario nicaragüense, quien consideró que lo anterior tiene más desesperado al imperio norteamericano, pues ahora ya no puede doblegar a los países soberanos con sólo enviar notas, como acostumbraba hacerlo en el siglo pasado.
En ese sentido, se refirió a la Nota Knox que provocó la renuncia del presidente José Santos Zelaya, y que hizo que continuara la lucha anti-intervencionista del pueblo nicaragüense contra los Estados Unidos. “Estos son momentos
de lucha intensa, porque son momentos de cambios profundos para bien de los pueblos”, planteó.
Fortaleza del pueblo vencerá amenazas
“Son momentos en los que tenemos que unir fuerza”, insistió, para recordar la guerra contrarrevolucionaria dirigida y financiada por el imperio. “Nos lanzaron después del triunfo de la Revolución, la guerra que duró casi 10 años. el presidente Ronald Reagan empeñado en buscar la destrucción de la Revolución Sandinista. ¡Y no pudieron destruirla!”, destacó. El comandante Ortega historió un poco cuando el FSLN perdió las elecciones en 1990, pero quedaron las conquistas básicas de la revolución para luego retomar el gobierno a través de elecciones en 2007. “Y empezó otra vez la conspiración de nuevo, y empezaron las agresiones y sanciones económicas, que es el arma que están utilizando ahora por todos lados…, buscando cómo bloquear a los países que no se someten, no se subordinan a sus políticas”, denunció.
“Y vamos a seguir con esta lluvia de amenazas y sanciones, seguro, pero tenemos la certeza que nuestros pueblos tienen la fortaleza, tienen la dignidad para vencer en favor de la paz a pesar de las sanciones, a pesar de las amenazas”, aseguró.
El presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel pronunció las palabras de inauguración de la XVI Cumbre recordando los inicios del proyecto que se convertiría en el ALBA, ideado por los comandantes Chávez y Fidel. También habló de los logros obtenidos por la alianza regional; hizo referencia a la ayuda mutua que los obreros y profesionales de los países que pertenecen al ALBA han brindado todos estos años de manera oportuna y altruista; condenó las medidas hostiles adoptadas contra varios países de la región; y llamó a impedir el hegemonismo.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro consideró que “El ALBA ha sido y es el único proyecto de integración y unión de los pueblos de América Latina y el Caribe que ha sabido llegar al hogar del humilde, a la vida del humilde, llevar amor, salud, educación, solidaridad, vida, presencia. No hay otro”.
Nuevos métodos golpistas de EEUU
“El pensamiento económico de nuestros países tiene que evolucionar hacia una visión latinoamericanista y caribeña, hacia una visión unionista”, dijo el mandatario abogando por una zona económica propia y común, y criticando la actual visión “segregadora, heredera del capitalismo económico”.
El presidente de Bolivia, Evo Morales denunció ante los países miembros del ALBA-TCP los nuevos métodos golpistas de Estados Unidos contra la región. “Hay nuevas formas de golpismo e intervencionismo”, aseguró el mandatario, quien señaló que los ataques del imperialismo se ven enfrentados a los “movimientos sociales y el pueblo organizado” que responden “con mucha claridad ideológica y programática, basada en la soberanía
económica, política, social y cultural”.
Los Jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros del ALBA suscribieron una Declaración Final en la que, entre otros aspectos, ratifica el compromiso del bloque regional con la concertación política, la cooperación y la integración.
Leída por el Presidente cubano, en la Declaración se reitera la voluntad de continuar impulsando un nuevo orden internacional, democrático, justo, inclusivo y equitativo; destaca la necesidad de que las organizaciones internacionales adopten las medidas que se requieran para enfrentar las violaciones al comercio internacional que entrañan las medidas coercitivas unilaterales.
También se expresa preocupación por las agresiones y acciones contra la paz y seguridad regionales, especialmente las amenazas de uso de la fuerza contra Venezuela, que atenta contra la declaración de América Latina y el Caribe como zona de paz; y ratifica el apoyo al gobierno de Nicaragua y su determinación a seguir defendiendo su soberanía.